Los embutidos son de los productos con más venta y consumo alrededor del mundo. Estos generalmente son introducidos en las tripas naturales de algunos animales. Las tripas para embutidos, por lo común, son clasificadas por tamaño, calidad y principalmente por el animal de donde provienen.
Como existen diferentes tipos de tripas para embutidos, la clasificación dependerá del embutido para el cual están destinadas, por lo que es importante que conozcas su clasificación:
Tripa de cerdo
Las primeras tripas para embutidos de este listado son las tripas de cerdo. Éstas generalmente son usadas para embutidos que son más frescos y que, principalmente, se condimentan con sal.
También hay diferentes tipos de tripas para embutidos de cerdo. Entre éstas encontramos las tripas de cerdo raspado que se presentan en muchos tipos de calibres y en longitudes de hasta 80 metros. Las encontramos en forma de entubado y se usan para la elaboración de butifarra o chorizo.
Otro tipo de tripas para embutidos de cerdo son el cular de cerdo. Éstas las encontramos en menor cantidad de calibres y en longitudes de 60 centímetros. Esta tripa sirve para elaborar salchichones y chorizo cular.
Tripas de ovino
Las tripas para embutidos de ovino sirven para elaborar embutido curado y embutido fresco; igualmente son ideales para elaborar salchichas frescas o cocidas. Hay tres tipos de tripas para embutidos de ovino: las de calidad AB y B, en salmuera y entubada.
De estos tipos las que más se comercializan y consumen son las tripas para embutidos de ovino calidad AB y B. Estas son las tripas naturales de cordero, se presentan en muchos calibres y en longitudes de 80 centímetros. Este tipo de tripa hay que mantenerla en temperaturas adecuadas, aunque en menor tiempo que la tripa de cerdo.
Tripa de bovino
Por otra parte tenemos las tripas para embutidos de bovino. Este tipo de tripa se utiliza generalmente para hacer butifarra, mortadela, lomo y morcillas. Esta tripa debe conservarse a una temperatura ambiente para garantizar su calidad.
Tripa de colágeno comestible
Este tipo de tripas para embutidos pueden clasificarse en pequeño calibre y de gran calibre, de colágeno muy flexible y apto para el consumo. Las tripas de colágeno son ideales para la producción de salchichas frescas, cocidas, crudas, curadas, entre otras.
Tripa de celulosa
La tripa celulósica para embutidos es mucho más resistente y económica que la hecha de colágeno. Además, es la más utilizada para envolver salchichas y preparar salchichas cocidas. Esta capa es útil para poner indicaciones en ella, así como los ingredientes que contiene.
Tripas plásticas
Las tripas para embutidos de plástico se utilizan en productos como chorizo y salchichas. Éstas se caracterizan principalmente por sus propiedades de barrera, resistencia mecánica, termoencogimiento y termoresistencia. Además, éstas permiten una personalización del producto, funcionando también como etiqueta informativa con código de barras y características del producto.
Fundas fibrosas
La tripa de fibrosa se usa principalmente en embutidos de gran calibre, como mortadela, pepperoni, jamón, entre otros. Este tipo de tripas para embutidos se caracteriza por su resistencia y por su permeabilidad, lo cual ayuda a conservar en buen estado el producto. Además, ofrece una apariencia natural que atrae la atención del consumidor.
Tripa vegetal
Este tipo de tripa es 100% natural. Está elaborada de celulosa vegetal con un recubrimiento vegetal. Su uso más frecuente es en la elaboración de embutidos de gran calibre, como salchichón, chorizo ancho o salami.
Tripa gruesa
Las tripas gruesas para embutidos son de una mejor calidad, ya que resisten más la manipulación y la contención del producto. Éstas permiten un mejor desfunde del contenido y son más resistentes.
En AERSA contamos con distintos tipos de tripa para embutidos para satisfacer las necesidades de tu empresa. Contáctanos y descubre la amplia gama de soluciones de envasado que tenemos para ti.