Las bolsas para alto vacío son una de las mejores soluciones inteligentes para la conservación de alimentos. Para el sector de embutidos y empresas de cárnicos, esta forma de empacado permite ofrecer mejor calidad y seguridad al consumidor. Es un recurso práctico y de buen costo que garantiza la conservación e higiene necesarias para cumplir con las normas actuales.
Las bolsas para empacar al alto vacío ofrecen una barrera inteligente que además permite flexibilidad y durabilidad. Dependiendo de su grosor, las bolsas para alto vacío ofrecen múltiples beneficios y pueden ser utilizadas para varias industrias cárnicas.
¿Cómo funcionan las bolsas para alto vacío?
Las bolsas para empaque al alto vacío tienen como función principal eliminar el oxígeno al momento de empacar. Dado que no hay aire, es posible postergar la formación de bacterias y microorganismos, prolongando la caducidad de los alimentos. Además, en el caso de vegetales y frutas, al eliminar el aire es posible retardar la oxidación natural de alimentos frescos.
Incluso es posible conservar alimentos de orden lácteo de forma segura, así como alimentos precocidos. Dependiendo de su la fabricación de las bolsas es a través de la coextrusión o el laminado, las bolsas pueden conservar una gran variedad de alimentos perecederos.
Grosor igual a ventaja
Además del tipo de fabricación, las bolsas para alto vacío tienen un grosor específico y, dependiendo de este, derivan sus beneficios y ventajas.
Las bolsas para alto vacío de grosor o espesor fino son fabricadas con un espesor de 90 micras. Estas bolsas son especialmente desarrolladas para conservar alimentos por periodos de tiempo cortos. De esta forma es posible conservar en óptimas condiciones productos con un alto tráfico de consumo. Los alimentos de tipo blando como quesos, algunos tipos de masa, carnes deshuesadas y embutidos, se pueden conservar con este tipo de bolsas.
Las bolsas de grosor alto se fabrican con un espesor de 120 micras y están diseñadas para conservar alimentos de amplio volumen. La idea es proporcionar una conservación más extendida. Es posible asegurar productos más delicados en caducidad como pescados y carnes de cerdo y cordero. A mayor espesor, mayor la capacidad de protección para los productos.
En AERSA contamos con una amplia gama de soluciones de empacado para productos cárnicos: bolsas “pouch”, Ziploc y “Stand Up” Ziploc, así como con muchas otras opciones de empacado. Si necesitas asesoría para encontrar bolsas para alto vacío adecuadas para tus productos, contáctanos.
