¿Qué es la cadena de frío?
La cadena de frío la definimos como cada actividad o procedimiento por el que pasan alimentos como las canales de cárnicos. Durante este procedimiento son expuestas a bajas temperaturas para conservar la integridad de los productos antes de ser adquiridos por el consumidor final de forma segura.
Se le llama cadena de frío porque incluye diversas etapas por las que pasa la canal. Inicia desde que obtenemos la materia prima, después pasa al área de proceso donde es tratada, posteriormente almacenada hasta estar lista para su distribución y finalmente llega al punto de venta. Siempre buscando conservar temperaturas de refrigeración entre los -1° y 4°.
¿Qué pasa cuando se rompe la cadena de frío?
Al sufrir cambios de temperatura, las canales comienzan a tener sudoración, esto provoca cambios físicos como el color, la textura e incluso el sabor del producto.
Consejos
A continuación, te brindamos algunos consejos para evitar romper la cadena de frío:
- Mantén las canales en el mismo rango de temperatura durante cada proceso para evitar la creación de bacterias que puedan provocar daños a la salud.
- Si deseas refrigerar productos cárnicos, las temperaturas ideales son entre los -1° y 2° C, evitando exceder de los 4° C.
- Cuando tus productos requieran estar congelados procura no pasar de los -18° C. Después de esta temperatura comienza a generarse escarcha que afectará las características del alimento.
- Mantén una distancia de 3 pies entre cada canal, así como entre la pared y tus productos. Esto permitirá el paso de aire y evitará perder la temperatura idónea.
Mantén contacto con tus distribuidores para garantizar el buen estado de tus productos en punto de venta, ¡no olvides pedir evidencias de esto!
Sigue estos consejos para cuidar la integridad de tus productos cárnicos. Recuerda que si deseas asesoría sobre equipos para el procesamiento de alimentos, en AERSA estamos para apoyarte.
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